La leucemia puede acabar con tu médula ósea

 

 

La leucemia es una enfermedad muy grave que desgraciadamente no tiene cura o muy rara vez se cura y afecta gravemente a aquellas personas que la padecen, no importa la edad o género, la leucemia ataca a cualquier persona en este planeta.

Leucemia

La leucemia es un tipo de cáncer de la sangre que comienza en la médula ósea, el tejido blando que se encuentra en el centro de los huesos, donde se forman las células sanguíneas.
El término leucemia significa sangre blanca.

Los glóbulos blancos (leucocitos) son producidos en la médula ósea y el cuerpo los utiliza para combatir infecciones y otras sustancias extrañas.

 

La leucemia lleva a un aumento incontrolable de la cantidad de glóbulos blancos.
Las células cancerosas impiden que se produzcan glóbulos rojos, plaquetas y glóbulos blancos maduros (leucocitos) saludables. Entonces, se pueden presentar síntomas potencialmente mortales a medida que disminuyen las células sanguíneas normales.

 

Las células cancerosas se pueden propagar al torrente sanguíneo y a los ganglios linfáticos. También pueden viajar al cerebro y a la médula espinal (el sistema nervioso central) y otras partes del cuerpo.
Existen varias causas para generar esta enfermedad, aquí te presentamos algunas:Causas
En la mayor parte de los casos de leucemia, no se puede establecer una causa identificable. Sin embargo, está demostrado que no es un padecimiento hereditario o contagioso.Existen, sin embargo, una serie de factores de riesgo:

• Historia previa de tratamiento para otras enfermedades cancerosas: Haber recibido quimioterapia o radioterapia puede provocar una alteración o daño celular que derive en lo que se conoce como una leucemia secundaria. 

• Padecer un trastorno genético: Enfermedades como el síndrome de Down incrementan la posibilidad de una persona de padecer leucemia. 

• Exposición a agentes tóxicos: El contacto con determinados agentes tóxicos, ya que sean ambientales, profesionales o asociados a hábitos como el tabaquismo, aumentan el riesgo de leucemia. 

 

• Historia familiar: En casos minoritarios, tener antecedentes familiares de leucemia puede ser un factor de riesgo.

La leucemia genera varios síntomas que pueden ayudar a detectar el posible padecimiento de esta enfermedad.

Síntomas

Los síntomas varían en función del tipo de leucemia ante el que nos encontremos. Estos son los más comunes:

• Leucemia mieloide aguda: Cansancio, pérdida de apetito y de peso, fiebre y sudores nocturnos.

 • Leucemia mieloide crónica: Debilidad, sudoración profusa sin razón aparente y, al igual que en el caso anterior, fiebre y pérdida de apetito y de peso.

 • Leucemia linfocítica aguda: Sensación de mareo o aturdimiento, debilidad y cansancio, dificultades respiratorias, infecciones recurrentes, formación de moratones fácilmente, fiebre y sangrado frecuente o grave en nariz y encías.

 • Leucemia linfocítica aguda: Además de algunas de las manifestaciones ya descritas, como la debilidad, el cansancio, la pérdida de peso, la fiebre o los sudores nocturnos, este tipo de leucemia provoca el agrandamiento de los ganglios linfáticos y dolor o sensación de hinchazón estomacal.

Otros síntomas generales son dolor en los huesos, como resultado de la multiplicación de las células leucémicas en el sistema óseo, o la aparición de anemia, cuyas características son palidez, cansancio y poca tolerancia al ejercicio, fruto de la disminución de glóbulos rojos.

A consecuencia de la enfermedad también se produce una bajada en el número de glóbulos blancos (leucocitos), situación que repercute en las defensas del enfermo frente a las infecciones.La reducción del número de plaquetas que conlleva la leucemia provoca asimismo la aparición de manchas en la piel (petequias) y hemorragias esporádicas.

Las más comunes son a través de nariz, boca o recto y las más graves son las que pueden producirse en el cerebro, a raíz de una caída severa del número de plaquetas. 

Afortunadamente existen muchos tipos de tratamientos que pueden ayudar a controlar esta terrible enfermedad.

El objetivo del tratamiento de la leucemia es destruir las células cancerosas, para que las células normales puedan volver a crecer en la médula ósea, y evitar la recidiva. En general el tratamiento de la leucemia se basa en la quimioterapia y los trasplantes de médula ósea. Las pautas de la quimioterapia varían dependiendo del tipo de leucemia, de modo que debe individualizarse para cada paciente

En la quimioterapia se suelen emplear combinaciones de fármacos, y si las células leucémicas reaparecen al cabo del tiempo, el trasplante de médula ósea puede resultar la mejor alternativa de curación para el paciente. Sin embargo, para que esto sea posible es necesario obtener la médula ósea de una persona compatible (HLA-compatible) con el enfermo, normalmente un familiar cercano.

También existen tratamientos naturales los cueles son muy benéficos para el cuerpo y aquí te presentamos algunos ejemplos.

 

Remedio para la leucemia #1: Lavar bien 500 g de raíces frescas de lampazo mayor cortarlas en rodajas y hervirlas en 2 litros de agua hasta que reduzca a 1 litro, colar, verter el líquido obtenido sobre: 20 g de raíz de genciana.  Tapar y dejar en infusión durante 1 hora, colar y repartir en 8 partes a tomar en 4 días, a razón de 2 veces al día, durante 16 días consecutivos, descansar 6 días y tomar de nuevo 16 días, es decir 32 días.

Remedio para la leucemia #2: Dejar hervir 50 g de hojas frescas de brotes tiernos de ortiga menor durante 10 minutos en 1 litro de agua y después añadir: 40 g de trébol de agua. Dejar hervir de nuevo durante 5 minutos, colar y repartir en 8 partes a tomar en 4 días, a razón de 2 veces diarias, durante 8 días consecutivos, descansar 4 días, 4 veces seguidas, es decir, 32 días en total.

Remedio para la leucemia #3: Hervir durante 10 minutos en 1 litro de buen vino tinto  50 g de trébol de agua y  20 g de raíz de genciana .al que se habrá añadido miel, colar y conservar en el frigorífico, tomar 4 cucharadas soperas de este vino 2 veces al día, 5 minutos antes de la comida del mediodía y de la noche, cada día, hasta acabar el preparado, tomar 3 preparados consecutivos, intercalando algunos días de descanso entre cada uno de ellos.

También existen suplementos alimenticios que pueden ayudar a fortalecer nuestro sistema inmunológico incrementando las proteínas como el glutatión y la cisteína las cuales se encargan de regenerar las células del cuerpo ayudando a controlar los estragos de la enfermedad.

 

 

 

 

 

 

 

fuentes de información:

https://medlineplus.gov/spanish/ency/article/001299.htm

http://www.cuidateplus.com/enfermedades/cancer/leucemia.html

http://www.webconsultas.com/salud-al-dia/leucemia/tratamiento-de-leucemia-2598

http://www.remediospopulares.com/leucemia-html.html  

 https://www.youtube.com/watch?v=c8YR3A4s9Bc

https://www.youtube.com/watch?v=tHtlLKe9kUQ

https://www.youtube.com/watch?v=XJKm4V2GGmo&t=437s

https://www.youtube.com/watch?v=x0L6FtEhZps

https://www.youtube.com/watch?v=XCs8DcoSpMw